Se viene el G-20. Ustedes saben que vienen los principales líderes del mundo aquí a Buenos Aires dentro de poco más de una semana.
El Gobierno decretó la ley de derribo, es la segunda vez en poco más de diez años que se decreta algo así. La primera vez fue en la visita del ALCA durante la gestión de Néstor Kirchner (2005), después en febrero de 2016 cuando vino Barack Obama y ahora cuando acuden al país todos los líderes del mundo.
Esto quiere decir que si aparece un avión intruso en un radio de cuatrocientos kilómetros, el Gobierno tiene el aval y la autorización para derribarlo.
Al mismo tiempo hubo algunos de episodios que sirven de alerta. Un grupo de anarquistas pusieron algunas bombas caseras de poca sofisticación y ya han sido detenidos
Y un dato que sí es preocupante es la detención de dos ciudadanos de origen sirio acusados de terrorismos. Atentos con esto porque da la sensación que es una sobreactuación de la policía, son dos personas que viajaron a Medio Oriente porque tiene familiares allá.
Se los acusa de ser parte de Hezbolá que es una agrupación política que tiene ramificaciones terroristas, pero de ninguna manera significa que todos los seguidores de Hezbolá son terroristas.
El exceso de prevención genera exceso de miedo. Y el exceso de miedo, a veces genera injusticias.
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